viernes, 26 de octubre de 2012

Carta de Cesare Pavese a Pierina (Fragmentos)


Cesare Pavese


..El amor es como la gracia de Dios -la astucia no sirve-. Por mi parte, te quiero mucho Pierina, te quiero como una fogata. Llamémoslo el último resplandor de la vela...





Querida Pierina:

... Pierina, quisiera ser tu hermano -ante todo porque en ese caso habría entre nosotros un vínculo menos banal, y después para que pudieras escucharme y creerme con confianza. Si me enamoré de ti, no es sólo porque, como se dice, te deseaba, sino porque tú y yo estamos cortados con la misma vara, y te mueves y hablas como lo haría yo, si en vez de ser un hombre que sólo aprendió el oficio de escribir hubiese tenido tiempo de aprender a estar en el mundo. Por otra parte, existe la misma elegancia y seguridad en lo que yo he escrito y en tus días. Sé entonces a quien le hablo.
Pero tú, a pesar de haberte vuelto árida y casi cínica, no estás al fin de la vela como yo. Tú eres joven, eres lo que yo era a los veinticinco años cuando, decicido a matarme por no sé qué desilusión, no lo hice -era curioso por el mañana, curioso de mí mismo- la vida me había parecido horrible, pero aún me encotraba interesante a mí mismo. Ahora es a la inversa: sé que la vida es estupenda, pero que estoy fuera de ella, y el mérito es todo mío, y sé que esta es una tragedia fútil...
...¿Puedo decirte, amor, que nunca me desperté con una mujer al lado, que cuando quise a alguien nunca me tomaron en serio y que ignoro la mirada de agradecimiento que una mujer dirige a un hombre? ¿Y puedo recordarte que, a causa del trabajo que hice, siemrpe tuve los nervios destrozados y la fantasía ágil y exacta y el gusto por las confidencias ajenas? ¿Y que estoy en el mundo desde hace cuarenta y dos años? No se puede quemar la vela de los dos lados -en mi caso la quemé toda de un solo lado y la ceniza son los libros que he escrito...
...El amor es como la gracia de Dios -la astucia no sirve-. Por mi parte, te quiero mucho Pierina, te quiero como una fogata. Llamémoslo el último resplandor de la vela...










Cesare Pavese conoció a la joven Pierina en Bocca di Magra, y con ella vivó su última gran experiencia amorosa en 1950, poco antes de que decidiera suicidarse. 



















3 comentarios:

  1. Me encanta la vida y la obra de Pavese. Gracias

    ResponderEliminar
  2. "El último resplandor de la vela", pero resplandor al fin. Los más bellos versos, los más estremecedores se escriben en medio de la más honda desesperación, quizás no muchos estén de acuerdo conmigo, pero me calan muy hondo. Seguramente la muerte venía con sus ojos y lo miró con amor.
    Me acabo de dar cuenta que toda carta desesperada es en principio un soliloquio, no importa si el o la destinataria la lee algún día, uno escribe para uno mismo y para la eternidad.

    ResponderEliminar
  3. Ajeno a la vida... me da tanta pena no haberle conocido, no haber podido hablar con él. Sigue estando dentro de la vida y muchos lo necesitamos para vivir, porque muchos sentimos el dolor de la existencia.
    Sí estabas, Cesare, aunque en el lado más oscuro, desde el que se entiende el lado oculto.

    Palabras que atenazan la garganta y el corazón.

    Un abrazo, Carlos.

    ResponderEliminar